Mejor respuesta
Los principios de administración presentados por Henri Fayol son los siguientes:
- Unidad de Mando
- Transmisión jerárquica de órdenes
- Separación de poderes, autoridad, subordinación, responsabilidad y control
- Centralización
- Orden
- Disciplina
- Planificación
- Organigrama
- Reuniones e informes
- Contabilidad
Respuesta
Todas las organizaciones, incluso las pequeñas, deben ser administradas. En principio, no importa si se trata de empresas que cotizan en bolsa, organizaciones no gubernamentales, empresas familiares; necesitan ser administradas.
Eso conduce inevitablemente a la pregunta: ¿quién o qué supervisa a estos gerentes? A veces, un consejo familiar. A veces los socios. A veces, una institución pública y, en caso de quiebra, un especialista legal.
La gobernanza se trata de los controles generales y la orientación para que esos procesos de supervisión sean exitosos y beneficiosos. Considera cuestiones tales como a qué partes interesadas un consejo de gobierno debe un deber, cómo usa su tiempo y dónde debe estar el equilibrio entre la orientación general y la gestión operativa.
El cumplimiento es parte de ello. A raíz de varios contratiempos, en muchos países se han elaborado normas específicas para sectores o tipos de organizaciones específicos. En el caso de empresas que cotizan en bolsa, bastante complicadas. En el caso de las entidades financieras, aún más complicadas. Sin embargo, si el proceso de supervisión se preocupa principalmente por el cumplimiento, la verdadera función se pierde.
Se aplican los principios de una buena gestión entre las personas en funciones ejecutivas en una organización y los responsables de la función de supervisión. a la administración pública también.
Incluso se podría argumentar que el gobierno es uno de los ejemplos más antiguos de este oficio, y que tal vez el acuerdo de la Carta Magna del Reino Unido entre el Rey y el Parlamento y la administración pública es uno de los primeros ejemplos . El otro ejemplo famoso es la idea francesa de Montesquieu de que los poderes judicial, ejecutivo y legislativo deben mantenerse separados entre sí para evitar el absolutismo (una antigua palabra para el comportamiento dictatorial).
Visto desde esa perspectiva, es Es muy interesante ver los intentos de personas como Donald Trump y Boris Johnson de probar esos límites y ver si pueden traspasar sus fronteras.
Pero también en un nivel más mundano, un ayuntamiento local se enfrenta a cuestiones de gobernanza similares. ¿Tienen un deber con toda su comunidad, o solo con quienes los eligieron? Si las personas que los votaron lo hicieron porque están a favor de una idea racista, ¿es un buen gobierno pedirle a la organización de la ciudad que realmente implemente esa idea racista?
O, si el ayuntamiento es descontentos con el jefe de reglamentos de construcción, ¿deberían intentar asumir las funciones del jefe de reglamentos de construcción? ¿O pedirle a la administración de la ciudad que evalúe al jefe de reglamentos de construcción y lo reemplace si es necesario? ¿Cómo asegurarse de que un futuro jefe de reglamentos de construcción sea más adecuado para su función?
En conclusión, la buena gobernanza no se trata de un dictador más eficaz. Se trata de velar por los procesos que hacen que un conjunto organizativo complejo funcione cada vez mejor con el tiempo, en todos sus deberes para con aquellos a los que tiene un deber. Y sí, eso se aplica también a la administración pública, quizás especialmente.